Regalar una cesta de fruta fresca en un gesto maravilloso en sí mismo, pero tambien dá mucha alegría encontrar entre las frutas algún detallito más, algo que tenga que ver con nuestros gustos o aficiones, o algo útil y/o divertido.
Entre los detalles que más he utilizado están los comestibles y bebibles como: bombones, chocolate, cava, vino, miel, pastelitos de merendilla..., en breve tengo pensado regalar una cesta a una persona muy especial en la que incluiré aceite de oliva virgen extra y mermelada entre otras delicias.
En cuanto a "cosas" no comestibles figuran : libritos de recetas de postres, moldes de repostería, temporizadores de cocina ( si, esos pequeños despertadores que se usan para que no se nos quemen los garabanzos...), bolsas de la compra de bolsillo ( tengo algunas maravillosas en forma de fresa), agendas o libretitas, tazas para café o té, peluches, babateles, libritos infantiles....
Y para San Valentín, bueno, quien dice San Valentín puede decir tambien para una noche especial, para un cumpleaños, para un detalle romántico con tu chico o chica, tambien hay detallitos como : nata, alguna prenda interior sexy, unos dados del amor, unas esposas de terciopelo, sirope de chocolate...., lo que quieras, siempre que puede adquirirlo y pueda meterse en la cesta.
Como veis hay muchísimas detalles con los que sorprender a las personas a las que regalamos una cesta además de con la fruta y la cesta o cajita que las contiene. Y si no lo veis aquí, siempre podeis darme ideas y sugerirlos.
Después de leer esto, ¿no me digáis que regalar una de estas cestas o caja no es un gesto maravilloso? A mi me lo parece y ¡me encanta!
Qué bonito todo lo que haces y lo que escribes.
ResponderEliminarBesos y mucha suerte!